Pasan los días,las semanas, los meses y los años, y ahora que me acerco a los 28, me he dado cuenta que casi todo sigue igual. Que no consigo dar todos los pasos adelante que debería. Que por mucho que lo intente me sigo estancando. Y la verdad que este tema me preocupa. Porque ya no soy un niño, porque ya tengo edad de empezar a valorar las cosas que me pasan y las oportunidades que se me presentan. Porque no puedo estar siempre excusándome y aprovechando cualquier resquicio para perder el hilo de las cosas como si realmente no importaran. En definitiva, porque tengo que madurar, que estoy empezando a estar cansado de que me pase siempre lo mismo.
Yo sé de mis capacidades y cualidades, que puedo y debe dar más de lo que doy. Pero no sé el motivo por el que no lo consigo. Creo que ese "miedo" es el culpable de los fantasmas que me persiguen y no se van, aquellos que por una vez y durante un tiempo creí que habían desaparecido. Hablo de la falta de concentración, de la desconfianza, de dejadez, de cierto pasotismo en muchas cosas que hago, en la desgana, en no aportar todo lo que debería, en no demostrar todo el interés que tendría que mostrar en ciertas cosas...
Sé que la vida nos lleva por diferentes caminos en los que hay que seguir creciendo y aprendiendo; yo creí que lo estaba haciendo, aunque ahora pienso que me he equivocado, que todo sigue siendo igual que entonces, que nada ha cambiado...
En fin, la vida...
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